Antes de entrar en detalles con la Microendodoncia os explicaremos que la Endodoncia es un tratamiento dental que permite conservar un diente enfermo cuando este tiene la pulpa (comunmente conocida como nervio) inflamada o infectada. La pulpa es la parte profunda del diente y contiene vasos sanguíneos y nervios, situándose en la parte central de la raíz y comunica el diente con el hueso maxilar.
Con el microscopio quirúrgico tenemos un acceso de total precisión y gracias a él podemos encontrar zonas ocultas y llegar a eliminar las bacterias y el tejido enfermo que esten afectando a partes profundas del diente.
Las ventajas del uso del microscopio dental en los tratamiendos endodóncicos son múltiples: mejor visualización general incluso con el esquivo cuarto conducto de los molares maxilares, diagnóstico certero permitiendo descubrir y atajar microfracturas y fracturas longitudinales que a menudo pasan desapercibidas con técnicas convencionales, mejor calidad general del tratamiento, ofreciendo una mayor efectividad y con menor tiempo de recuperación del paciente, mejor ergonomía tanto del paciente como del médico dentista, luchamos mejor contra obliteraciones, calcificaciones y pulpolitos, mejor tratamiento en los casos de ápice abierto, mejor reparación de perforaciones y retirada precisa de elementos fracturados que pudiera tener el diente. Una vez limpia, tratada y desinfectada la pulpa del diente, se procede a su reparación. Para el sellado se usa un material termoplástico llamado gutapercha con instrumental específico que disponemos en nuestra clínica dental.
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